No es fácil la crianza, nuestros hijos pueden llegar a ser sumamente desafiantes y quieren hacer todo cómo y cuando ellos quieren. Es una constante negociación y realmente se vuelve agotador. Es cierto que algunos niños son más dóciles que otros, pero igual todas pasamos por momentos en que perdemos la paciencia porque nos hartamos de repetir las cosas cien veces y nos cansamos de que no nos hagan caso!

Los tres años de Joaquin no han sido fáciles, más aún teniendo como competencia a su hermanita.   Sino leyeron el post que escribí sobre mi Threenager lo pueden leer aquí.   Últimamente cada vez que le digo que no a algo y no puede hacer lo que quiere. Me hace un escándalo, llora, grita y cuando le trato de explicarle la razón está tan molesto que se bloquea y ni me escucha.

Estoy usando una técnica que me viene funcionado bien para lograr que me haga caso. Le doy opciones para que el pueda elegir. Por ejemplo, cuando me dice “Mami, ¿puedo ver tele antes de bañarme?” y le digo que No puede y cuando ya esta por empezar a hacerme un escándalo, lo freno y le digo: “Te voy a dar dos opciones y tu eliges, opción 1: te bañas y te dejo ver un capítulo ya con pijama y luego te vas a dormir o Opción 2: Te vas a bañar y no vez nada”. Algunas veces me pide una opción 3 pero le digo que no hay, que sólo puede elegir entre esas dos.   Es una buena técnica porque el siente que está decidiendo y además le divierte porque es como un juego, casi siempre me hace repetirle las opciones dos o tres veces hasta que finalmente elige una.

La técnica de darles opciones es buena porque conseguimos nuestro objetivo y dejamos que ellos decidan por sí mismos. Los niños pueden ser razonables cuando les damos la oportunidad de aprender a serlo. Al dar alternativas para que elijan podemos hacer que ambas opciones sean cosas que queremos que pasen, es decir que si elige la 1 o la 2 me da igual, porque no me molesta que vea tele ya bañado y si se va a dormir sin ver tele también sería perfecto así que por donde lo mires es un win win para nosotros como papás.

Antes de perder la paciencia y torturarte creyendo que es tu culpa porque lo estás criando mal… No te olvides que tu hijo no es el único que no obedece, que te ignora y que no hace caso. A todas nos pasa, es parte de ser niño ellos están en un aprendizaje constante y se la pasan probando y desafiando los límites para generar su propia autonomía.

¿Ustedes tienen alguna otra técnica que les funciona? Intercambiemos ideas así nos ayudamos 😉

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Escrito por kiki

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