¿Tu hijo/a solo acepta comer tallarines o come como pajarito y se demora 2 horas para comer? ¿Es un TEMA la alimentación de tu hijo en la casa y cuando se acerca la hora de darle de comer se te paran los pelos?
El dolor de cabeza y angustia de toda mamá es tener un niño/a difícil para comer. Es que alimentarlos es un trabajo agotador tanto física y mentalmente, pero con la paciencia de santas que tenemos y un poco de buen humor podemos ayudar a nuestros pequeñines a comer saludable y de todo.
En su primer año, los bebés crecen más rápidamente que en cualquier otro momento en su vida, así que es relativamente fácil conseguir que coman alimentos nuevos. Pero el segundo año los niños se convierten en seres que empiezan a razonar y a darse cuenta de que negarse a comer es una gran manera de llamar la atención. Ellos son más vivos que nosotros, cuando nosotros estamos de ida ellos ya están de vuelta. Nos manipulan desde muy pequeños con la comida porque saben de que pie cojeamos. No nos dejemos vencer. ¡Mamás unidas jamás serán vencidas!
La buena noticia es que casi todos los niños que previamente han sido “buenos comedores” vuelven a comer bien. La mala noticia sin embargo, es que esto es por lo general en sus términos y a su manera.
Te voy a compartir unos tips súper útiles para que poco a poco tu hijo/a empiece a comer un poco más y sobretodo y muy importante le enseñes acerca de lo importante que es para el/ella que coma todo eso. Pero lo que más te va a ayudar es seguir con la paciencia de santa que te caracteriza y no tirar la toalla y además ponerle siempre una gran sonrisa a todo, ya que ellos sienten todo lo que sientes (desesperación, frustración, molestia) y sin querer se la trasmites.
1.     Se positiva: Oculta tu frustración. Todo lo que sientas, se lo trasmites al niño, la hora de comer debe de ser para disfrutar no para sufrir. A mal tiempo buena cara. Felicita al niño cuando come muy bien, o prueba algo nuevo.
2.     Enséñale: Vayan juntos a comprar la comida, que te ayude a juntar las frutas y las verduras y explícale la importancia de ellas, además, también explícale los alimentos que no le hacen bien. Cocinen juntos, que te ayuden a hacer la ensalada o preparen galletas o queques saludables. Otra manera de enseñarle es cantar canciones acerca de los alimentos saludables. Para que ellos empiecen a meter en su alimentación ciertos alimentos, una buena estrategia es hablar de sus personajes favoritos y contarles que ellos comen frutas, verduras y comen todo. Por ejemplo, si es fanática de la princesa Rapunzel y quiere tener el pelo de ella debe comer todas las frutas y verduras que Rapunzel come.
3.     Haz lo que le gusta en una versión saludable: Si es fanático de los tallarines entonces ese debe ser el plato que vas a utilizar como entrada de muchas verduras. Haz tu versión saludable por ejemplo dale siempre los integrales con salsas de distintas verduras o si es fanático de las papas fritas, hazlas al horno o si le gustan los purés siempre introduce purés con nuevas verduras.
4.     Disfraza la comida: Disfraza las verduras, puedes agregarla en los nuggets, hamburguesas, ponerlas como purés, en salsa para los tallarines e incluso hasta en los queques.
5.     Haz que la comida sea atractiva y divertida: Ofrécele pequeñas porciones, ya que no es bueno llenar demasiado el plato de los niños. Además, los niños generalmente prefieren las porciones más pequeñas de los alimentos, por lo que es una buena idea hacer alimentos como mini hamburguesas, pequeñas flores de brócoli y zanahorias baby. También les gusta comer de pequeños envases. Que tu imaginación fluya, haz figuras con la comida, puedes hacerle bolitas de papa o de arroz, caras con verduras, panqueques en forma de corazón.
6.     Limpia tu despensa: Si en tu refrigeradora o despensa siempre hay comida saludable y fresca entonces ellos siempre tomaran este tipo de comida. Evita tener chucherías en la despensa.
7.      “Comida chatarra” SALUDABLE: Crea tu propia “comida chatarra” sana. Puedes preparar bases de pizza con pan pita integral y dejar que tu hijo escoja los ingredientes para prepararla. Prepara hamburguesas utilizando carne magra de calidad, utilizando un pan integral y las papas en bastones al horno. Si le gustan los nuggets los puedes apanar en harinas saludables como de quinua o avena y hacerlos al horno.
8.      Comienza como te gustaría que continúe: Si se acostumbran al sabor de los alimentos frescos y variados desde el principio (nada que venga en envases), son mucho menos propensos a convertirse en niños difíciles para comer cuando los intentemos integrar en las comidas familiares.
9.     No te alteres: No lo fuerces si no quiere comer, intenta luego de la siesta o mas tarde. Si solo te pide un tipo de comida y solo hace rabietas, explícale hablándole que no le vas a cambiar el plato que debe comer eso. Se dará cuenta que no tiene mucho sentido hacer una rabieta si no reaccionas a ellas.
10.    No recompenses con dulces: Puedes recompensar con stickers por ejemplo: estrellitas. Una idea buena es tener un formato donde por cada semana que haya completado con estrellitas (es decir haya comido sin problemas todo) pueden realizar una actividad divertida como por ejemplo vamos al cine el sábado, o jugamos futbol por una hora, o pintamos juntos o vamos al zoológico o cocinar juntos galletas. Pero papis aquí si hay que cumplir sino el niño pierde la credibilidad. Evita las recompensas de comprar juguetes o de dulces porque lo estas premiando con algo que no es saludable y le terminas dando el mensaje equivocado,
11.    Tratar de comer juntos: Comer con toda la familia, siempre que sea posible, puede hacer que tu hijo cambie su actitud. Quitar el foco de atención sobre la comida del niño y mantener una conversación familiar puede ser muy útil. Además, los niños copian todos nuestros patrones buenos y malos, por eso hay que ser el mejor ejemplo para ellos. Si ven desde muy chicos que sus papás comen de todo, saludable, frutas y verduras ellos copiaran esos patrones y se interesaran más por ellos.
12.   Snacks saludables: Siempre ten a la mano o a la vista snacks saludables para cuando regresen del cole o en la tarde como por ejemplo frutas, queques caseros, bolas de kiwicha, pasas, frutos secos, etc.
¿No es un trabajo fácil no? Esto es un proceso largo, no es de un día para otro, así que no te desesperes ni te desanimes. Lo bueno es que una vez que lo logres le quedará para toda la vida.

Lic. Antonella Bustamante Tizon
Nutricionista CNP 4732
Tel: 2424850 – 951939214

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Escrito por kiki

    2 comentarios

  1. maria 21 julio 2014 at 11:26 Responder

    Gracias por compartir! Estoy empezando con la comida, mi hija tiene 8 meses, y lo mejor es paciencia, buen humor y desde ahora empezar con los alimentos saludables! Me gustaría saber como hacen las otras mamás con la leche, si es que se les da leche igual cuando termina la lactancia (pienso darle 11-12 meses), y que tipo de leche pueden o deben tomar…mi plan es evitar la fórmula.
    Felicidades por el blog!
    Saludos

    • lamamadejoaco 24 julio 2014 at 21:10 Responder

      Hola yo le di lactar 9 meses y después si le di formula. Pero otras opciones podría ser la leche de almendras, la de soya tiene muy poco nutrientes para ellos. GRACIAS por leer el blog!

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